lo que nunca pensamos que nos pasaría

si, ahí está el monstruo, ese momento histórico del que pensábamos que nos habíamos librado...crisis, guerras, invasiones, saqueos, violaciones...eso eran cosa del tercer mundo...que a saber donde estaba...o de períodos históricos que languidecían en los aburridos textos escolares de unos absurdos libros de historia....y nos dejamos mecer por un totalitarismo agradable y autocomplaciente, el de la indiferencia...y entonces empezaron a decir cosas, que si los periódicos mentían, que si los políticos robaban, que si la gasolina iba a obligarnos a utilizar de nuevo el servicio público...entonces...entonces...disimulamos nuestro gesto desconfiado y nos empezamos a sentar en los últimos asientos del autobús, comenzamos a prestar un poco de atención al precio de la tapa del Lizarrán, dejamos de hacerle ascos a las marcas blancas, introdujimos de nuevo denostadas proteínas en nuestra dieta, volvimos a tender juntos nuestros pares de calcetines...y escuchamos con cierta atención a ese pesado amigo radical con su matraca del día...que si a la ex de no se qué ex ministro la hacían presidenta de no sé que empresa medio pública de paradores nacionales con un pedazo de sueldo que triplicaba al del presidente del gobierno....tengo demasiados calcetines desparejados...y le digo que si, que tiene razón pero que tengo que colgarle también a el, que se me quema la menestra de verduras que acabo de poner a recalentar en mi wok....y suena el teléfono...otra vez...ese aparato más antediluviano que su propio nombre...por qué no esperarán a que me conecte...por qué no me mandan un guasa y se dejan de historias...oh no!  ¡es ella! ...la pelma de mi amiga de casi toda la vida...la que siempre estaba feliz...y entonces...le digo que si a ella no le quedan desparajados también los calcetines....no, a mi no me pasa, ...sólo me dice que acaban de amenazar con un ere a su marido....que trabaja en paradores nacionales...y que no sabe si le quedará mucho sentido del humor para seguir llamándome y animarme con lo mío...que se van setecientos a la calle porque tienen que pagar un sueldo de infinitos ceros a la derecha a un directivo de los cojones....y entonces ya no aguanto...no me da tiempo a tender otro puto calcetín y sin pensármelo me asomo y vomito....menos mal que aún no había retirado las jodidas  jardineras....bueno...los geranios lo aguantan todo ¿no amigo P.? y entonces sí que sentimos el temor ancestral de sabernos irremediablemente unidos a una época...maldita historia!